“La mujer que se transforma en máquina”, proyecto de videoteatro dirigido por Tamara Figueroa AS, académica y diseñadora escénica, se basa en el ensayo “Manifiesto para ciborgs” de la bióloga e historiadora de la ciencia Donna Haraway.
La obra relata el viaje de transformación de la androide K-1000 a las bases de un sistema tecnológico integrado, que la hace preguntarse por la condición de ser mujer y ser máquina. Con una estructura trágica, y protagonizada por Claudia Cabezas, la obra introduce el lenguaje del video multimedial y del sonido electrónico, instalando una relación virtual entre la mujer y el coro, dentro de un universo de ciencia ficción.
El proyecto que dirige Tamara Figueroa AS resultó ser uno de los siete seleccionados de la convocatoria realizada por Escenario Compartido, a la que postularon 170 proyectos en total. “La mujer que se transforma en máquina” es una de los dos representantes de las artes escénicas regionales, en este caso de la Región de Valparaíso. Escenario Compartido es una instancia programática y colaborativa que reúne a Teatro UC, Teatro del Puente, Centro Gabriela Mistral GAM, Mori-Famfest, Parque Cultural de Valparaíso y Teatro Biobío en la exhibición de obras inéditas para ser presentadas en formato digital.
“Tamara convocó a artistas de varias disciplinas, donde el trabajo audiovisual y sonoro fue más experimental. Los ensayos se plantearon desde el diálogo entre todos los que estábamos ahí, ensamblando propuestas en base al texto, que es bien filosófico. Como actriz escuché mucho, el personaje se construye desde todas las artes que confluyen en la escena, siendo relevante el uso de la tecnología, de la mano de la naturaleza del ser humano”, explica Claudia Cabezas sobre el proceso creativo de la obra.
El trabajo instala el formato del videoteatro, una pieza audiovisual que pone en escena el texto escrito por Sebastián Farah, quien realiza la dramaturgia sobre fragmentos del ensayo de Donna Haraway, dispuestos en una estructura de tres partes, presentándonos a tres personajes: una mujer, la máquina y el coro, este último interpretado por la destacada actriz de trayectoria Naldy Hernández.
Desde los cuestionamientos de la teórica Donna Haraway, el montaje reflexiona en torno a qué es lo que define el ser ‘mujer’ desde una perspectiva posfeminista. “Creo que es de interés para cualquier persona que le guste la pantalla y también para quienes se vinculan con las estéticas de las artes mediales y electrónicas. El trabajo de la sensibilidad del formato, del video, y del desarrollo histórico de la mujer que se transforma en máquina, es lo más relevante”, complementa la directora, Tamara Figueroa AS.