Ciento setenta proyectos postularon a la convocatoria de Escenario compartido, alianza programática entre Mori- Famfest, Teatro UC, GAM, Teatro del Puente, Parque Cultural de Valparaíso y Teatro Biobío.
Siete son los proyectos ganadores de la convocatoria que impulsaron en conjunto el Teatro UC, Teatro del Puente, Centro Gabriela Mistral GAM, Mori-Famfest, Parque Cultural de Valparaíso y Teatro Biobío en un trabajo programático colaborativo llamado “Escenario Compartido”.
La iniciativa estuvo abierta a compañías, agrupaciones y profesionales de las artes escénicas que presentaran trabajos inéditos y contemporáneos en formato digital grabado.
Tras recibir 170 propuestas, los seis espacios culturales seleccionaron dos proyectos de regiones, dos de carácter familiar y otros con temática contingente con la realidad país en sus procesos de construcción de futuro.
La selección comenzará el 13 de agosto con “Grisú (esta obra no está terminada)” de la Región del Biobío, obra basada en cuentos de Sub Terra de Baldomero Lillo, y adaptada por Heine Mix Toro en 1972 junto a Teatro Minas del Carbón de Lota. En ella se aborda la vida de los mineros que participaron del montaje original.
El actual proyecto rescata esta obra y la presenta como un trabajo de investigación escénica, donde se propone una visión actualizada del texto, sumándole archivos, documentos e imágenes proyectados sobre el escenario a través de mapping.
A fines de agosto será el turno de “Stendhal”, dirigido por Simón Román, un montaje teatral donde el Museo Nacional de Bellas Artes se convertirá en el escenario del reencuentro de una especie humana perdida. A través de temáticas como la humillación, la muerte y soledad, la pieza reflexiona sobre la importancia del arte en un eventual futuro pospandémico.
En septiembre llegará desde Valparaíso “La mujer que se transforma en máquina”, de Tamara Figueroa, una performance escénica electrónica basada en el ensayo “Manifiesto para Cyborgs”, que relata el viaje de transformación de una androide que se pregunta por la condición de ser mujer y ser máquina.
En octubre se estrenarán tres montajes: “Estrellado”, del Colectivo Artístico Circo Virtual, que mezcla el cine, mapping, animación y nuevo circo, para contar la historia de un astronauta que aterriza en Santiago. Tras encontrarse el viajero con una niña, el relato hablará del encierro, la imaginación y la fantasía de un realismo mágico.
En “Mi cuerpo celeste, un concierto en el cosmos”, Alejandro Miranda, contará la historia de una niña que descubre un extraño instrumento musical, con el que aprenderá sobre las estrellas, los planetas y la música que hay en todas las cosas.
A cargo de Tamara Ferreira, “El pañuelo de Ulises, un ejercicio de memoria” indagará a modo de teatro documental sobre la función de memoria de los objetos personales y su particular efecto en el contexto de muertes durante la pandemia de COVID-19.
Finalmente, en noviembre se estrenará “Baviera”, de Daniela Contreras y Edson Cajas, una propuesta de teatro audiovisual sobre los horrores de Colonia Dignidad. Allí, una mujer intenta reconstruir su realidad, al recordar fragmentos de abusos y humillaciones sufridas en el hospital donde fue secuestrada de niña por una familia alemana.