Cinco ciudadanos son elegidos como representantes del consejo vecinal y deberán reunirse para intentar resolver la complicada situación que aqueja a la comunidad. Para eso resuelven poner en práctica los valores básicos que creen conocer y que son los que han sustentado su vida. Sin embargo, con el paso de las semanas notarán que aquellas ideas en las cuales siempre han creído resueltamente, tomarán un trayecto insospechado.
A través de una cháchara desmedida y en un contexto de conversaciones respetuosas, será difícil discernir la diferencia entre lo cívico y lo bárbaro, o entre lo tolerante y lo opresivo, todo esto cuando deban proteger con sangre una idea tan difícil de entender como “la dignidad” –ese valor con el que nacen todos los ciudadanos-.