Una mujer lesbiana se encuentra en prisión por haber asesinado en defensa propia a uno de los hombres que la violó correctivamente. Encerrada y sin salida, la protagonista de esta historia evidencia una espera interminable debido a la rotación consecutiva de los abogados. CONTY, de Clama Vargas y dirigida por Carlos Briones, es una obra del Colectivo Anfibia y co-producida con Espacio Checoslovaquia, que llega a la cartelera de agosto de Teatro del Puente, con funciones desde el sábado 9.
“Es una ficción inspirada en dos noticias que ocurrieron durante el año 2022. Analicé estos sucesos, como punto de partida para la dramaturgia, y al mismo tiempo, reflexioné sobre la violencia que sufren estas cuerpas pobres por el hecho de no pertenecer a la estructura binaria, heterosexual”, explica Clama Vargas, dramaturga de CONTY.
A través de su relato en primera persona, la obra deja a la vista la violencia sexual, de género, social, de clase y jurídica que ha recaído sobre su protagonista en las distintas etapas de su vida.
“Debido a que la violencia de género recae en el cuerpo, con este proceso logré instalar una metodología de escritura desde el cuerpo. Me refiero al cuerpo ficticio del personaje disidente y a los cuerpos reales, tanto el cuerpo de la actriz y mi propio cuerpo como dramaturga, porque desde ahí hago surgir la palabra, es decir, la palabra dramática nace de la relación entre los cuerpos y la expresión de sus experiencias vitales”, agrega Clama Vargas.
“El público será testigo de una experiencia teatral íntima donde Coca Miranda ensambla ante sus ojos el universo representacional del texto de Clama, a través del gesto, la palabra, el silencio, los objetos. Se trata de un obra donde la actriz no solo interpreta un personaje, sino que construye en vivo un universo dramático a partir de la tensión entre el encierro y la libertad emocional de Conty. Se trata de construir complicidad con este relato urgente sobre amor, transgresión y supervivencia”, complementa Carlos Briones, director de CONTY.
Reseña
Una mujer lesbiana, pobre, jardinera, que ama las plantas y sueña con ser arquera de fútbol profesional, se encuentra en prisión por haber asesinado en defensa propia a uno de los hombres que la violó correctivamente. Encerrada y sin salida, la protagonista de esta historia evidencia una espera interminable debido a la rotación consecutiva de los abogados. CONTY, a través de su relato en primera persona, deja a la vista la violencia sexual, de género, social, de clase y jurídica que ha recaído sobre ella en las distintas etapas de su vida. Amor, transgresión y violencia se entrecruzan en la vida de esta joven que sueña con quedar libre para ser arquera de fútbol profesional y poder amar en libertad.
